En ocasiones excepcionales una mínima luz 
es capaz de iluminar la oscuridad más intensa. 
(Villancico sacado del baúl de mis versos olvidados)
¡FELIZ NAVIDAD!
La noche es fría y oscura, 
duerme un niño en un pesebre, 
palmatoria de ternura 
en las manos de un orfebre.
No hay hermosos alumbrados, 
nadie prepara una cena, 
no hay turrón ni mantecados, 
ninguna campana suena. 
Estrella de resplandores 
sobre el establo de bueyes, 
le agasajan los pastores, 
le adoran magos y reyes.
Luz que habita en un candil 
hecho de humana hojalata, 
ilumina más que mil 
candelabros de oro y plata.
 




