Dime que
en tu piel escondes
profundo
grabado el beso
que yo
escribiré tu nombre
en las
dunas del desierto
y no ha de existir el viento
que con su soplo las borre.
Di que quedaron tus manos
con mis huellas confundidas,
que mil versos he grabado
en las
hojas infinitas
de la
hierba, que a tu paso
el cielo
a gritos recita.
Dime que
también me amas,
que aún
siendo mi paso leve
en tus
témpanos mi escarcha
es
lágrima incandescente.
Di que
es mi verso de lava
hiriendo
tu eterna nieve.