Si vierais las fuentes de arena cegadas,
feraces vergeles de cicuta infectos,
playas de gaviotas mudas y desiertas.
No lloréis por ellas
llorad por nosotros y por nuestros hijos
herederos de la tierra
Si vierais el aire de cuerpo invisible
severo enemigo violentando el pecho,
si vierais los frutos sin su primavera.
No lloréis por ellos
Llorad por nosotros y por nuestros hijos
herederos de la tierra
Si vierais extintos el cóndor y el ibis,
exhausto de especies el vientre marino,
si vierais las aves en cepos de brea.
No lloréis por ellos
Llorad por nosotros y por nuestros hijos
herederos de la tierra
Si vierais las uñas avaras del hombre
invadir los campos sin justa medida
y en matriz amarga crear sus quimeras.
No lloréis por ellos
Llorad por nosotros y por nuestros hijos
herederos de la tierra
Si vierais la selva en boca de fuego,
antorcha en los brazos de anchas ambiciones,
insignes linajes a destierro y miseria.
No. No lloréis por ellos
Llorad por nosotros y por nuestros hijos
herederos de la tierra.
Mª Teresa, me he quedado impactada con tu poema, le he releído, porque es una joya de esas que se pegan al alma. Por una parte me parecían profecías, del mismo Jesús de Nazaret, o del Apocalipsis de san Juan, es un maravilloso poema, con una moraleja que se repite y es como una campana que tocase para dar tiempo al arrepentimiento.
ResponderEliminarNo. No lloréis por ellos
Llorad por nosotros y por nuestros hijos
herederos de la tierra
Un abrazo con alas de esperanzas..
Lo escribí con el dolor de ver lo que hacemos con la Tierra, la que nos mantiene vivos. Equivocadamente pensamos que el daño se lo ocasionamos a la naturaleza cuando, en realidad, nos lo causamos a nosotros mismos porque somos parte de ella y ella, en todo caso, nos sobrevivirá.
EliminarGracias Ángeles. Un beso
Deberían leer tu poema todos aquellos que parecen no entender que todo el daño que causan a la naturaleza se lo están haciendo a ellos mismos, y, como tu dices, a sus hijos, herederos de la tierra. Pero siempre ha habido y habrá desalmados que sólo tienen ojos para el dinero, como si de él pudiesen alimentarse y respirar.
ResponderEliminarTremendos y muy acertados tus versos
Besos
Como bien dices, hay gente que solo tiene ojos para el dinero y mientras ellos vivan y se llenen sus bolsillos no les importan las consecuencias de sus actos ni a quien afecten en el presente o en el futuro. Es triste pero, no creo que a estas personas les afecte mi poema ni ningún otro.
EliminarGracias por tu comentario
Un beso.
Muy hermosas letras M. Teresa, un agrado leer tus poemas tan llenos de inspiración, y gracias nuevamente por visitar mis letras y dejar tus comentarios. Saludos, un gran abrazo para ti.,
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