El otoño teje un vestido de verde y oro para que  la bella durmiente "Gaia" luzca hermosa. 
Durante el invierno dormirá hasta la próxima primavera.
Entrad y descubrid hoy 
a la puerta de las sombras crecientes
mecerse en el aire, 
moribundas las hojas,
moribundas las hojas,
saciadas de sol.
Alimentadas de luz
yacen ahora 
henchidas de oro sobre la tierra.
henchidas de oro sobre la tierra.
La vestirán con traje de gala 
para que luzca hermosa la bella durmiente
los cien días invernales.
Hasta que al fin despierte 
con el beso de amor,
que encenderá en su cara rubores,
la primavera.
Gaia. © Teresa S.M.
