La poesía toca con sus alas lo más pequeño, lo más excelso, toca el dolor y la alegría.
Nos pega a la tierra, a los seres vivos, nos eleva y transporta a otra dimensión.
Preciosos versos, Teresa. Sobre todo la última estrofa. Un cordial abrazo.
Muchas gracias, Rita, allá donde estés. Quedará indeleble en mí la memoria de tu luz.
Preciosos versos, Teresa. Sobre todo la última estrofa. Un cordial abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Rita, allá donde estés. Quedará indeleble en mí la memoria de tu luz.
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