Espero que la ciencia no me acuse por divagar poéticamente
sobre las hipótesis de los agujeros negros.
Un agujero negro está tragándose un sol.
De nuevo la trágica y negra metáfora de la muerte
La antimateria desordena,
absorbe los corpúsculos de la inteligencia,
la hace estremecer en su enigma.
Mientras minúsculos insectos
se devoran unos a otros,
el pez grande se traga al pequeño
y los parásitos engordan
a la sombra de bestias colosales
todo un sol es engullido
por un agujero negro.
Certifica la ciencia.
Creo, más bien,
que la estrella huye
del ambicioso ojo del hombre
hacia otros universos puros.