La poesía toca con sus alas lo más pequeño, lo más excelso, toca el dolor y la alegría.

Nos pega a la tierra, a los seres vivos, nos eleva y transporta a otra dimensión.

02 mayo 2010

A final del camino


 
Cuando me aleje
al volver la espalda
quizá refleje
la silueta cálida
de un recuerdo.

Al fin del sendero
mi estrella aguarda
sigo el destello
de sus migajas.

Quizá a lo lejos
de ardiente nostalgia
me aguarde el beso.

7 comentarios:

  1. Teresa, es un placer y un regalo al alma, leerte.

    Un abrazo
    Rita

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  2. Teresa, un hermoso poema, pero hoy solo paso a desearte un Feliz Día de la Madre en compañia de tu familia. Un fuerte abrazo.

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  3. Sería imposible que te alejaras y no dejaras huella. Calas hondo.

    Besos

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  4. Precioso; que así sea.
    Por de pronto un beso mío (respetuoso)aunque no sea lo mismo...

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  5. Me gusto mucho un saluditos en la distancia. Muy bello. Nos vemos.

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  6. Un poema esperanzado,prometedor de un beso.
    Un saludo a la distancia desde Chile.

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  7. Que bonito Teresa...quizás me aguarde un beso...esperanzador....muy bonito...Un besico...

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