La poesía toca con sus alas lo más pequeño, lo más excelso, toca el dolor y la alegría.

Nos pega a la tierra, a los seres vivos, nos eleva y transporta a otra dimensión.

12 mayo 2009

Primavera irreverente

Afloras primavera irreverente, 
invitas al perfume de tus rosas,
extiendes pinceladas luminosas
y mi pesar desprecias, insolente.

A mí, hoy me llovieron las espinas
de todos tus rosales encendidos,
sangrando van torrentes mis sentidos
rocíos de dolor que no imaginas.

En mi tierno frutal no madurado
no he de hallar la virtud de tus albores,
no tendré la alegría a mi cuidado

en el triste lugar donde me encuentre
porque vengo de enterrar entre tus flores
la rosa más preciada de mi vientre.